quote:
Originalmente escrito por mammamia
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¿ Y a mi que me cuentas ?.
Si lo llaman para trabajar a trabajar y ya está
Mammamia, tranquilo hombre, no iba contigo, jajajajajaja,
Lo que pasa es que tan injusto me parece que defraude uno como que lo haga el otro, pero la diferencia muchas veces es enorme, uno lo hace sin necesidad, por codicia, el otro lo hace por sobrevivir, pero a pesar de ello me parece deleznable tanto uno como lo otro, y por supuesto, miraría de que las leyes fueran también justas, que no se decantes de parte de quien no tiene necesidades, sino que se inclinen más por quienes más necesitan, pero no les des "pescado", dales una "caña" y enséñales a pescar, como dice una parábola muy conocida por muchos.
Si a ese que defrauda para poder sobrevivir porque tiene necesidades importantes, le ayudas a que declare lo que gana y le enseñes la forma de potenciar su trabajo con deducciones en su declaración, te aseguro que mirará de actuar siempre bien, al que defrauda sin necesidad, solo por ansias de enriquecerse más y más, tienes que penalizarlo por ello, no fomentar que siga aumentando la codicia, penalizar a ambos si lo hacen, pero si dejan de hacerlo, fomentar de algún modo, con las medidas oportunas, que no vuelvan a hacerlo. ¿Quien se indignará más? ¿el que defrauda por sobrevivir o el que lo hace por egoismo y avaricia? bien, la respuesta creo que todos la sabemos, y algunos la intentarán justificar con la tan manida excusa de "es que tú eres de izquierdas y perjudicas a los que tienen más!!!!!!!".
Pues no, no perjudico a nadie, porque el que mucho tiene no sufre perjuicio alguno, ni pasa necesidad por esas medidas, ni tampoco se le quita nada que le corresponda, simplemente se le "educa" en unos valores sociales que confrontan con la codicia, el egoismo y la avaricia, así no solo castigas el fraude que se hace sin necesidad, sino que reconduces la conducta para evitar que lo haga perjudicando a otros, y si lo sigue haciendo y amenaza con largarse del país, se le invita a ello y se le desea lo mejor en su paraiso fiscal, así de simple, no es más productivo quien más tiene y menos comparte, sino quien menos tiene y más comparte, es una sociedad más justa y equitativa, donde siguen habiendo clases bajas, medias y altas pero sin tantísimas diferencias entre ellas y con un nivel de convivencia más beneficioso.
Por supuesto, se quedarán los buenos empresarios, cuya intención es aumentar sus beneficios, pero cuidando la empresa desde el primer céntimo que aporte hasta el último empleado que tenga, generando empleo de calidad y respetando a sus trabajadores dignamente. En un curso de motivación para emprendedores me enseñaron que no es mejor empresario quien más gana, sino quien mantiene un equilibrio justo y razonable entre lo que gana y lo que invierte, si mantienes a tus empleados contentos y se sientan a gusto en su trabajo, no se irán a la competencia fácilmente y se sentirán parte importante en la empresa, hasta el punto de querer rendir mejor para aumentar beneficios, a sabiendas de que el empresario los repercutirá en ellos mismos y habrá una simbiosis que permitirá a la empresa prosperar mucho más y mejor que otras donde no haya ese equilibrio de valores, quizá no crezca a un ritmo vertiginoso, pero si lo hará con más seguridad y estabilidad que otras, y serán estas las que en tiempos de crisis se mantendrán fuertes y serán bien miradas y valoradas.
A alguno le invitaría a algún curso de ese tipo para que aprendiera a valorar a todos por igual, ya que hoy por hoy, seguro que hay empresarios que se arrepienten de haber echado a buenos empleados y los valoran ahora que no están o que se han ido a la competencia.
En fin, que si no se busca un equilibrio entre las partes implicadas en todos los aspectos sociales y laborales de una sociedad, si no se premia al que lo hace bien y se castiga al que lo hace mal, si no se involucran para mejorar las relaciones de ambos y se mantienen fuertes ante posibles sobornos para comprar sus voluntades, no llegaremos a nada bueno, y esto no lo logran los partidos que llevan anclados en el poder mucho tiempo, por eso hay que regenerar la política, para que gente nueva con ilusiones y con sacrificio, den lo mejor de si, para que luchen por ese equilibrio y no consideren la política una profesion con buenos sueldos y con poder para interferir en clases según su conveniencia, la política ha de regenerarse cada cierto tiempo, no con integrantes diferentes en un mismo partido, sino con partidos nuevos cada cierto tiempo, porque los que se presenten nuevos en un mismo partido serán meras marionetas de los que muevan los hilos dentro del partido y fuera también.
Un ciudadano, un voto, no más de tres legislaturas seguidas o alternadas por un mismo partido, sueldos éticos y con una parte fija y una parte variable en función de objetivos cumplidos (que los objetivos cumplidos sean los que determinen si el partido puede volver a presentarse en un futuro o no), nada de subvenciones a partidos ni a sindicatos, que lo paguen los afiliados solamente y con un límite de ingresos para que haya más posibilidades de igualdad entre partidos, menos medios manipulados por el poder, separar el poder de la justicia también, nada de sueldos para toda la vida después de gobernar, como hacen en EE.UU. durante un tiempo después de gobernar y punto, luego que sigan siendo ciudadanos como los demás, sin privilegios de ningún tipo, hay que regenerar la politica para que vuelva a ser una elección por vocación y no una carrera profesional para unos pocos privilegiados y cerrada a los demás que quieren aportar y poner su granito de arena, que los que se presenten lo hagan por su curriculum y no por lo que puedan decir públicamente.
Sobre esto último pongo un ejemplo, cuando alguien va a una entrevista de trabajo, no se pone a decirle al empresario "puedo prometer y prometo que haré mi trabajo mejor que nadie" porque eso no significa que valga para el puesto, solo que tiene labia suficiente para ello, nada más.
Por otro lado, que los que se presenten, hagan públicos sus bienes e ingresos y que si comete fraude o se corrompa, vaya a la carcel y no salga hasta que haya devuelto hasta el último centimo defraudado en su cargo de poder. Que la justicia sea igual para todos, y no mejor para unos y peor para otros.
En fin, podría seguir, pero creo que hoy por hoy, tal como están las cosas, eso es pura utopía, a menos que la gente cambie su mentalidad y quiera regenerar la política con su voto, eso no pasará, por lo menos en mucho tiempo.