Y no estarán ni en ese trazado del Gran Circo ni en ninguno. La cadena ha tenido que renunciar al contrato que le garantizaba el derecho de retransmitir las carreras para España, al que le restaban dos años más.
Debido a la crisis publicitaria y a la bajada de ingresos del sector, la cadena «no puede afrontar el pago», según afirman fuentes del canal.
La Sexta tenía un contrato de cinco años con Mediapro, titular de los derechos audiovisuales del Mundial de Fórmula 1. Ese contrato incluía los derechos de esta temporada y la siguiente.
Una vez rescindido el contrato con la cadena, Mediapro ha abierto un concurso para todos los operadores que estén interesados en emitir el Mundial en las temporadas 2012-2013 y 2013-2014.
Esos derechos se refieren a la emisión de la Fórmula 1 en la televisión en abierto y en internet.
Mediapro envió ayer las cartas para informar sobre la nueva situación y el plazo para la presentación de propuestas concluirá el próximo 6 de febrero.
La Fórmula 1 es uno de los contenidos que ha marcado la personalidad de La Sexta, que se ha volcado con la cobertura de este deporte con un equipo de profesionales liderado por el periodista Antonio Lobato.
El propio Lobato ha confirmado la información en su cuenta de Twitter.

Y en otro tuit ha confirmado que Mediapro ha abierto una subasta entre los operadores para encoontrar una cadena interesada en comprar esos derechos.

Con este movimiento, La Sexta se desprende de una de sus joyas de la corona (la otra es la Liga de Fútbol, cuyos derechos acaban esta temporada), la que le proporcionaba sus mejores datos.
La última temporada el Mundial de Fórmula 1 finalizó con una audiencia media de 3.369.000 espectadores y un 33,2% de cuota de pantalla. Unas cifras muy altas que es difícil que la cadena pueda recuperar.
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