El presidente del Colegio de Agentes Comerciales de Barcelona confiesa a ABC que hay «crispación» en muchas entrevistas de los profesionales con sus clientes
MARÍA JESÚS CAÑIZARES
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BARCELONA. «Nunca hasta ahora se había producido esta situación», asegura a ABC el presidente del Colegio Oficial de Agentes Comerciales de Barcelona (Coacb), Enric Enrech, que ayer dio la voz de alarma respecto al descenso de los acuerdos comerciales debido a la crispación que genera el debate sobre el nuevo Estatuto de Cataluña.
Tras las denuncias procedentes del sector del cava catalán, donde recientemente se advirtió de un descenso de las ventas en favor del cava valenciano, otros ámbitos de la economía catalana comienzan a verse afectados por el enrarecido clima político que rodea al proyecto catalán. Según Enrech, en las últimas semanas se han recibido quejas en el citado colegio profesional respecto a las dificultades de cerrar acuerdos comerciales en otras comunidades autónomas, especialmente en lo que respecta a productos de los sectores textil, vinícola y de alimentación (frutos secos, sobre todo).
«Nosotros somos ajenos a ideologías y partidos. Queremos comprar y vender, sin que el nacionalismo, la zona geográfica o el idioma de las empresas afecten a nuestra labor», asegura el representante de este colectivo profesional, que gestiona aproximadamente el 33 por ciento del Producto Interior Bruto de Cataluña.
Enric Enrech confía en que ese «pequeño boicot» no vaya más allá, pero reconoce que el ámbito laboral de los agentes comerciales se está viendo afectado y que «en sus entrevistas con clientes, la crispación que causa el Estatuto aparece en las conversaciones». Añade que «los agentes comerciales somos, en un cierto sentido, embajadores de nuestros productos y, por tanto, también de la imagen de Cataluña», y, aunque a nivel internacional no se ha notado ese descenso de contratos -en Cataluña hay 914 agentes dedicados a vender productos españoles en el extranjero-, sí que aumentan las dificultades dentro del ámbito español. Los últimos acontecimientos, sumados a un cierto desconocimiento de la política y el carácter catalanes, han repercutido negativamente, según el representante de este colectivo, en los negocios entre empresas catalanas y empresas del resto de España.
No es la primera vez que el ámbito empresarial se ve afectado por los avatares políticos. El caso más llamativo fue el perjuicio sufrido por el sector del cava catalán, cuando en noviembre de 2004 el presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira. pidió que ninguna institución catalana apoyara la candidatura olímpica de Madrid 2012. Debido a estas declaraciones, un productor de cava de la comarca del Penedès vio anulado un pedido de 80.000 botellas de cava en un solo día. A través de internet, páginas como «Stop Nacionalismo» o «Hasta los Huevos» invitan desde hace semanas a los ciudadanos a no comprar productos fabricados en Cataluña.
Pero, según afirma Enric Enrech, en el ámbito de los agentes comerciales hasta ahora no se había detectado un descenso de acuerdos debido a factores políticos. «Si los productos son igual de competitivos que hace unos meses y se mantiene la misma calidad, ¿por qué bajan las ventas?», se pregunta el presidente del Coacb, quien considera absurdo el boicot por la procedencia geográfica en una época en la que impera la tendencia a la globalización económica.
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En el diario de papel, se resalta una frase:
"Si los productos con igual de competitivos que hace meses y y con la misma calidad, ¿por qué bajan las ventas?"
Que pregunte al tripartito ...
saludos
