Operadores Móviles Virtuales (OMV)
- Martes, 7 de Febrero de 2006
- Redacción GSMspain
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Fomento de la competencia y reducción de los precios. Son los dos efectos que la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) confía en alcanzar tras la entrada en funcionamiento de los Operdores Móviles Virtuales aprobados la pasada semana por la Comisión Europea.
En funcionamiento en el 2007
La Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) instó a las tres grandes compañías del móvil -Telefónica, Vodafone y Amena- a que inicien ya las negociaciones con los nuevos operadores virtuales, que deberían estar en funcionamiento dentro de un año.
Entre otras condiciones, la autoridad administrativa les obliga a «poner a disposición de terceros», y «a precios razonables», todos los elementos necesarios para la prestación de los servicios de acceso y originación móvil minorista. El regulador afirma que los operadores «tendrán que atender a las solicitudes razonables de acceso a recursos específicos de sus redes y a su utilización», y hacerlo, además, «sin exigir a cambio un coste excesivo». Cada compañía dominante deberá también negociar «de buena fe» con los solicitantes autorizados, así como «prestar servicios específicos en régimen de venta al por mayor para su reventa a terceros».
Acceso libre a las redes de los operadores actuales
Los nuevos operadores virtuales podrán acceder a interfaces técnicas u otras tecnologías indispensables que ahora están en manos de Telefónica, Vodafone y Amena, que a su vez habrán de establecer modalidades para compartir instalaciones con las primeras e incluso «ayudar a garantizar la interoperabilidad» de los servicios que éstas presten. De la misma forma, estarán obligadas a dar acceso a terceros a los sistemas de apoyo operativos o a otros con funciones similares, así como a la interconexión de redes o recursos.
Tarifas mas baratas
Uno de los capítulos que más preocupa a la CMT en esta negociación es el económico. Insiste en que los precios que reclamen las empresas dominantes «no podrán ser excesivos ni suponer para la compañía solicitante un impacto en sus márgenes operativos que le impida su entrada como operador eficiente». De esta forma, las obliga a ceñir su oferta a la situación económica de los posibles compradores. La Comisión tendrá en cuenta a estos efectos, entre otras referencias, las tarifas existentes en mercados competitivos comparables.