Xfera quema los últimos cartuchos para salvar su licencia

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De El Mundo:

Xfera quema los últimos cartuchos para salvar su licencia

A la compañía de móviles se le agota el tiempo para encontrar un socio. El Gobierno revocará su autorización si no lanza el servicio antes del verano
ELENA HITA

MADRID.- En los últimos días, el trajín que se vive en la avenida vega 15, en la madrileña localidad de Alcobendas, es incesante. La sede del nonato operador de telefonía móvil, Xfera, es un auténtico hervidero. La amenaza del Gobierno de revocarle la licencia si no lanza sus servicios, a más tardar, a comienzos de verano, ha acelerado los movimientos de la empresa para cerrar un acuerdo de venta y salir del estado de hibernación en el que está sumida desde hace casi seis años. Pero el tiempo no sólo corre en contra de la compañía Xfera por el ultimátum lanzado por el Ejecutivo, la reciente entrada de nuevos rivales en el sector a través de los Operadores Móviles Virtuales (OMV) debilita aún más su posición negociadora y reduce sustancialmente su valoración en el mercado.

Los principales accionistas de la operadora, con Florentino Pérez, presidente de ACS, a la cabeza, negocian a contra reloj la venta de un paquete mayoritario a un socio tecnológico que les de el empujón necesario para iniciar su actividad. Los contactos se centran en la potente operadora china, Hutchison Wampoa. Tres años después de entrar en el negocio de la telefonía móvil UMTS, Hutchison se ha convertido en un poderoso rival que cuenta ya con 11 millones de clientes, repartidos por Asia, Oceanía y Europa (Italia, Reino Unido, Suecia, Dinamarca, Austria e Irlanda).

Sin embargo, después de meses de negociaciones, la operadora china no termina de deshojar la margarita. La compañía está pendiente de la salida a Bolsa de su filial italiana, que esta semana ha recibido el visto bueno de las autoridades bursátiles.

No obstante, el mercado no parece dispuesto a pagar 12.000 millones de euros por una compañía que cuenta con 5,7 millones de abonados -el pasado año, France Télécom pagó 10.600 millones por Amena, que tiene más de 10 millones de clientes- .

Pero además, las reglas del juego han cambiado completamente una vez que el Gobierno ha dado luz verde a la aparición de los OMV. Con los móviles virtuales aumentará la presión competitiva y se reducirá el margen de los operadores.

Es evidente que ante este panorama, Hutchison se replantee la situación. «Antes, la única opción para entrar en el mercado de la telefonía móvil era hacerse con Amena o Xfera, pero ahora ya no es necesario y hay otras opciones interesantes», explican fuentes del sector, en alusión a esta nueva figura.

El pasado viernes, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicaba la entrada en vigor de la actividad de los OMV, compañías de telecomunicaciones que no cuentan con red propia y deben alquilarla a los operadores con infraestructura (Telefónica, Vodafone y Amena). Para ello, el Gobierno insta a las empresas a cerrar acuerdos con el objetivo de abaratar las tarifas.

Otras compañías que también han mostrado interés por Xfera han sido América Móvil, del magnate mexicano Carlos Slim, y el grupo germano Deutsche Telekom.

Las conversaciones no han prosperado, más aún, cuando la amenaza de introducir los OMV planeaba sobre el sector desde hace meses.Los expertos no descartan incluso que Hutchison u otros operadores extranjeros decidan entrar en el mercado español a través de este modelo de negocio.

Así las cosas, la situación se complica aún más para Xfera. Es previsible que si no se llega a un acuerdo de venta, los accionistas decidan poner fin a una aventura que ha estado sangrando sus cuentas en los últimos seis años. Según datos de Informa, en 2004, la deuda de la compañía se situó en 388 millones de euros y las pérdidas en 30,7 millones (ver gráfico adjunto).

En marzo de 2000, Xfera fue una de las cuatro compañías adjudicatarias de una licencia de telefonía de tercera generación o UMTS, el móvil conectado a Internet a alta velocidad que ofrece servicios multimedia avanzados como videollamadas o televisión. Sin embargo, la imposición de una tasa inesperada y el retraso del desarrollo de la tecnología terminaron por congelar la actividad del cuarto operador.

En varias ocasiones la empresa ha informado del inicio de operaciones comerciales sin que finalmente se produjeran. La última se anunció esta semana, en un acto público en el que estaba la flor y nata del sector. Su consejero delegado, Antonio Cantón, afirmó que la compañía tenía previsto lanzar «inmediatamente» sus servicios, un término que ya empleó el pasado mes de julio, en otro acto público.

Problemas en el exterior

La situación de Xfera no es exclusiva del mercado español. En Italia se concedieron cinco licencias y ahora el Gobierno del país acaba de retirar la de Telefónica, tras vencer el plazo otorgado para la venta de la misma. Ipse, el consorcio donde estaba Telefónica, nunca llegó a iniciar su actividad. Lo cierto es que la compañía no ha tenido éxito en ninguno de los países europeos, a excepción de España, donde obtuvo la concesión para ofrecer telefonía UMTS. En Alemania, se le ha retirado la licencia por el cese de la actividad, decisión que la operadora ha denunciado ante los tribunales. Donde sí ha logrado vender sus frecuencias ha sido en Austria y ahora negocia la venta de las de Suiza.

En España, Telefónica Móviles y Vodafone lanzaron en mayo de 2004 sus servicios de telefonía de tercera generación y Amena, en octubre del mismo año. Según datos de la patronal del sector, Aetic, en 2005 se vendieron 20 millones de terminales, de los que aproximadamente 1,5 millones eran con tecnología UMTS.
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