Las fecha y el lugar elegidos para el segundo de ellos no son casuales, ya que el 26 de enero es el trigésimo aniversario de la muerte Marco, que fue abatido en un enfrentamiento con la policía. Enfrentamiento que ocurrió, precisamente, en el cruce de las calles Bru y Diputación, donde los independentistas celebrarán una ofrenda floral.
En un edificio público
Además, con motivo de ese trigésimo aniversario a esta ofrenda se sumará otra celebración que los jóvenes independentistas califican de "acto unitario" y que tendrá lugar en el Centro Cívico Pati Llimona, que es propiedad del Ayuntamiento de Barcelona y que se integra dentro de la red de "Espacios de Participación Ciudadana" del consistorio barcelonés.
Este centro es administrado por la empresa Transit Projectes, S.L., una compañía privada especialista en este tipo de actividades de gestión cultural que ha asegurado a Libertad Digital que la cesión y el alquiler de salas es uno de los requisitos que el ayuntamiento exige en los acuerdos de gestión de este tipo de centros.
También han confirmado que hay un procedimiento estándar a través del cual se consultan con un responsable del ayuntamiento, concretamente al Cap de Territori correspondiente, si deben celebrarse aquellas actividades que puedan colisionar con "derechos o libertades". De ser así, y se ha puesto como ejemplo un acto que estuviese organizado por una secta, "el acto se podría vetar".
Puestos en contacto con responsables del Centro Pati Llimona, han asegurado que todavía no se ha confirmado la disponibilidad de sala, por lo que podría finalmente no aprobarse la cesión (a pesar de la en la web de JERC sí se da por hecho que el acto se celebrará allí). Además, han afirmado que a pesar de estar programado para dentro de cinco días, tenían muy poca información sobre el acto en cuestión. Además, afirman que que en ese centro se da cabida a todos los partidos políticos, "la semana pasada tuvimos al PP", citan como ejemplo.
"Compañero de lucha"
A pesar de su participación en la creación de Terra Lliure y de los numerosos crímenes de esta organización terrorista los miembros de las JERC no tienen reparo en calificarlo de "compañero de lucha" y señalar que "cayó defendiendo los ideales de la organización".
También aseguran que fue abatido "mientras luchaba por unos Paises Catalanes independientes y socialistas".
Como veis, no hace falta quitar estatuas ecuestres de dictadores para que siga existiendo "fascistas".
