El concepto gaming del Xiaomi Black Shark no convence

El nuevo Xiaomi Black Shark tiene un diseño bastante interesante y sobre todo es una de las opciones más económicas que encontraremos en el mercado para hacernos con un dispositivo con el potente procesador Qualcomm Snapdragon 845. Aparte de eso no vemos ninguna característica o prestación que vaya a mejorar tu forma de jugar sobre terminales convencionales con las mismas configuraciones de hardware.

El nuevo Black Shark de Xiaomi muestra un diseño bastante clásico, aunque con una carcasa trasera de diseño bastante “agresivo”, con dos colores disponibles y fabricado en aluminio. Cuenta con una pantalla de 6”, con proporción 2:1 y 60Hz de frecuencia vertical (esperábamos más) y un sistema de doble cámara principal con sensores de 20 y 12MP respectivamente y una apertura en ambas ópticas F/1.75.

Xiaomi ha montado un sistema de heatpipes para su refrigeración, que afirman que reduce varios grados la temperatura del procesador, aunque tampoco es el primer terminal con este tipo de refrigeración “liquida”. Entre otras características encontramos una batería de 4000mAh con QuickCharge 3.0.

Lo mejor es el precio, que lo convierte en uno de los teléfonos con el S845 más económico del momento, con 400 Euros para la versión de 6GB de RAM y 64GB de almacenamiento y por solo 50 Euros más, el doble de capacidad, 128GB, y 8GB de RAM. El joystick USB-C costara 25 Euros. Comenzará a venderse, en China, a partir del 20 de abril.