Michael Jackson, que en junio del año pasado estableció su residencia en el emirato de Bahrein, se pasea por sus calles vestido como una mujer árabe, es decir, con una túnica negra de cuerpo entero y un velo tradicional femenino a juego que le cubre la cara. Para tapar el último resquicio de su rostro, los ojos, el excéntrico cantante estadounidense se ha colocado unas gafas también negras. Nadie sabe la razón por la cual Jackson se viste de mujer, pero si es en un intento de pasar desapercibido, no lo ha logrado. Ya lo hizo antes, pero esta vez hay fotos.
El pasado mes de noviembre, Jackson, de 47 años, fue sorprendido por primera vez ataviado con vestimentas tradicionales árabes femeninas en el interior de un baño de mujeres de un centro comercial del emirato de Dubai, según informaron varios medios de comunicación de ese país, que citaban a numerosos testigos. Al ser descubierto, Jackson trató de esconderse en una librería próxima de la gente que empezaba a aglomerarse en el lugar, mientras varias patrullas policiales se dirigían hacía allí.
Hoy, un fotógrafo de Reuters le ha pescado a la entrada de un conocido centro comercial de la capital de Bahrein, Manama, vestido todo de negro y con pinta de beduino del desierto. Así, el cantante llevaba gafas de sol negras, guantes, un velo que le cubría la cara y un abaya o túnica femenina de cuerpo entero. Bajo el vestido, le asomaban unos pantalones también negros y unos zapatos de hombre del mismo color. El otrora rey del pop llevaba de la mano al que parece ser uno de sus hijos, también con la cara tapada por un pañuelo.
A por unos zapatos nuevos
Acompañaban al cantante otros dos niños de aspecto occidental, uno con un velo negro y el otro azul, y una mujer negra desconocida, curiosamente la única que iba a cara descubierta. Como llevaban las caras tapadas, no se sabe a ciencia cierta si eran o no sus hijos. Jackson tiene tres. Dos de ellos con la enfermera Deborah Rowe, de la que está divorciado: Prince Michael, que nació en febrero de 1997, y Paris, en abril de 1998. Su tercer hijo es Prince Michael II, cuya madre permanece en el anonimato.
El caso es que el grupo llamó la atención de otros compradores, que rápidamente reconocieron en él a la estrella de Thriller, a pesar del disfraz. "¡Por favor, no!", ha gritado Jackson a los fotógrafos antes de escapar rápidamente con los niños y la mujer por la puerta de atrás del centro comercial.
La mujer que acompañaba al astro ha pedido a los cámaras que les dejaran en paz: "Tenéis que dejarle algo de privacidad. Por favor, tenéis que entender su posición, está con sus niños, tenéis que dejarnos solos". Según han dicho los fotógrafos, el cantante se estaba comprando unos zapatos nuevos cuando ha sido reconocido. Jackson se trasladó a este país del Golfo Pérsico como invitado de la familia real y huyendo de la presión de los medios tras su sonado juicio por pederastia, que acabó con un fallo de no culpable.
EL PAIS
