¿Es posible ejercer la autoridad política sin corromperse ni corromper?
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Ante la tentación, penitencia más dura
Por ejemplo, si se demuestra que un político X ha robado 1 millón de euros, y no los devuelve, que todo lo que gane a partir de ese momento sea para pagar la deuda (con intereses, claro).
Que no se permita que tenga nada a su nombre.
Que su familia directa tenga que demostrar de donde ha sacado el dinero para comprar sus posesiones
Que tenga que hacer trabajos sociales de por vida hasta que pague su deuda, etc.
Por ejemplo, si se demuestra que un político X ha robado 1 millón de euros, y no los devuelve, que todo lo que gane a partir de ese momento sea para pagar la deuda (con intereses, claro).
Que no se permita que tenga nada a su nombre.
Que su familia directa tenga que demostrar de donde ha sacado el dinero para comprar sus posesiones
Que tenga que hacer trabajos sociales de por vida hasta que pague su deuda, etc.
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Con la actual clase política y su ley del embudo imposible, lo peor de la sociedad esta en política y encima el pueblo les aplaude, para que cambiar si así les va bien, solo cuando el pueblo se canse y les ponga en el sitio que les corresponde que es la cárcel terminara la tortura de este pueblo confiado y borrego.
Tienen todo a su favor, unos medios de comunicación comprados con nuestro dinero para que nos engañen, una justicia politizada y servil, un capital que les corrompe dándoles oportunidad de forrarse y colocándoles en puestos de grandes retribuciones cuando dejan la política a cambio de los favores prestados.
Esto o lo cambia el pueblo ahora o no cambiara nunca, están debilitando al pueblo, dejándolo en la indigencia y metiendole el miedo en el cuerpo para destruir cualquier posibilidad de protesta u oposición a su latrocinio.
En este país los ladrones no van a la oficina, van a los ministerios y a los lujosos despachos que les pagamos todos para que nos roben mas cómodos.
Tienen todo a su favor, unos medios de comunicación comprados con nuestro dinero para que nos engañen, una justicia politizada y servil, un capital que les corrompe dándoles oportunidad de forrarse y colocándoles en puestos de grandes retribuciones cuando dejan la política a cambio de los favores prestados.
Esto o lo cambia el pueblo ahora o no cambiara nunca, están debilitando al pueblo, dejándolo en la indigencia y metiendole el miedo en el cuerpo para destruir cualquier posibilidad de protesta u oposición a su latrocinio.
En este país los ladrones no van a la oficina, van a los ministerios y a los lujosos despachos que les pagamos todos para que nos roben mas cómodos.
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